sábado, 30 de octubre de 2010

Sábado, sabadete

... Como no tengo camisa nueva ...

Aprovechando que los sábados no tengo que madrugar. Mejor dicho, aprovechando que los sábado madrugo, pero no tanto, esta mañana sonó el despertador a las 6.30. Tenía pensado hacer entre 35 y 40 minutos, para hacer mañana el rodaje más largo, en torno a 45 minutos. Parece que la cabeza me pedía caña, pero no tenía ganas ni piernas para rodar más rápido de cómo lo estoy haciendo en estos días. Ahora bien, me he subido casi todas las cuestas del pueblo, ahí sí que estaba motivado, tanto que, al pasar por la puerta de casa de mis padres, estuve a punto de llamar a la puerta para que me hicieran un laíto y acostarme en su cama. Finalmente he hecho algo más de 46 minutos. A esa hora ya se ve más ambiente en las calles, sobre todo porque el próximo lunes es el día de todos los santos y la plaza estaba repleta de flores y ya se veía a gente que parecía ir hacia el camposanto, la urbanización más tranquila de todo el municipio, y con unas vistas...Además, a esa hora se agradece pasar por delante de las panaderías locales y percibir el aroma del plan en plena preparación, de las rosquillas, de los pasteles. Un día de estos me paro y le echo la mano a la furgoneta de reparto (que tiene la puertezuela trasera abierta) y me pillo algo ...

     Imagen de una de las cuestecitas subidas (Calle San Sebastián, no Donosti)

A pesar de ser sábado, no me podía relajar, pues Tania se iba a las 8 para trabajar y a esa hora ya tenía que estar duchadito, oliendo a persona bien y dispuesto a bregar con la trupe aguileraduartiana, ya que algo después de las 9 había que salir a hacer la compra semanal. Misión cumplida. Ahora toca bajar, dar de comer al personal y pillar camino para el spa, que esta tarde hay curro programado.

Mañana será día de rodaje más suavito. Veremos qué sale. De momento, contento, como casi siempre.

jueves, 28 de octubre de 2010

Tercera Semana

Aunque dentro de un ratito ya estamos a viernes, no puse mi resumen semanal de "entrenamientos" correriles de la pasada semana. Finalmente, como la semana anterior, también salí a correr 4 días, uno de los cuales, novedad, a las 5 de la tarde, con luz solar y todo. Casi me veía extraño y todo, sobre todo viendo a gente mientras corría. En resumen, la pasada semana hice una sesiones de 29 minutos, 33 minutos, 41 minutos y 20 minutos, respectivamente. Todas fueron positivas, pero la más enriquecedora fue la de 41, ya que la hice en Los Llanos de Coín, en un circuito de algo más de 7 kilómetros, bien llanos como indica su nombre, pero con un repechito de 1,2 kms. que me dejó tocado durante un largo rato. Al finalizar este entreno, esperé a la familia en un pinar y echamos el día jugando con los niños, comiendo, buscando vencedor para el concurso de tortillas de patatas. Quedé en segundo lugar, empatado a puntos con mi hermana pequeña, Eli. La ganadora fue mi madre (¿quién si no?) y en cuarto lugar quedó mi cuñao César. 

Lo peor de esta semana es que un virus me dejó KO la primera parte y hasta esta mañana no he podido salir a correr. Han sido 33´33´´, bien tempranito, a las 5h40 de la mañana, así que, como siempre, tengo el pueblo para mí solito, algo que supone una ventaja si vas corriendo y tienes gases intestinales ...

Cada día que pasa me voy encontrando mejor, el cuerpo asimila mejor cada sesión y me recupero antes. Incluso, ya, de vez en cuando, se me pasan por la cabeza algunas carreras, cosa que me quiero quitar del pensamiento, que no quiero ponerme metas ni obligaciones más allá de salir a correr regularmente (al menos por ahora, luego ya veremos).

sábado, 23 de octubre de 2010

Día campestre

Hoy, después de mucho tiempo (la última vez fue hace dos años) nos vamos a reunir la familia para irnos de campo. Iremos a 15 kms. de casa, a un lugar conocido como Los Llanos del Nacimiento, en Coín. Es un sitio que conozco desde que era corredor alevín, pues allí se celebra una de las carreras de campo a través de más historia y tradición en la provincia de Málaga. Se trata de un paraje llano (como indica su nombre), rodeado de pinos, que por ahora se está salvando de la masificación urbanístico (aunque creo que hay o hubo un plan urbanístico rondándolo), donde se respira aire puro, donde se reúnen las familias para pasar el tiempo libre. Llevaremos a todos los niños, así que eso será un ir y venir detrás de uno y de otro.

Yo me iré en plan avanzadilla para pillar sitio, así aprovecho para correr un ratito (algo más de media hora, espero). Luego, a pasarlo bien, comiendo, bebiendo, riendo, disfrutando. De paso, hemos organizado un concurso de tortillas de patatas. Habrá diplomas y todo. La mía se llama "Espanglish Omelette". Ya os contaré.

Salud y buen fin de semana

martes, 19 de octubre de 2010

Nueva semana

Ayer comenzamos una nueva semana. Yo, después de no se cuántos meses, volví a salir a correr ... ¡de día! Sí, sí, logré salir a las cinco y media de la tarde. Ahora bien, lo hice un poco obligado por las circunstancias. Era media tarde cuando Tania, mai midel oranch, me ofreció comer un poco de la rica tarta de queso. Como tenía pensado salir a correr, le dije que no, que luego no podría ir a correr. ¿Solución? Salir a correr a esa hora. ¿Lo peor? Que había comido lomo de cerdo al horno con papas y la digestión estaba en pleno apogeo, así que tocó sufrir un poco de flato a la vuelta, costándome a veces respirar más de la cuenta. Finalmente hice 29 minutos, bajando un minuto y medio en la misma distancia que la última salida. Contento. Estiramientos, duchita, y a hincarle el diente a la tarta de queso. Ay, omá, qué cosa má ricaaaaaaaaaaaaaaaa. 

Al correr a esa hora, razonable, como los humanos normales, el cuerpo ya estaba bien despierto, mucho más alerta que 12 horas antes, por lo que la velocidad, de forma involuntaria, era más elevada que de costumbre, algo que estuvo a punto de pasarme factura al final. Voy percibiendo los progresos, así que estoy contento. El objetivo de esta semana es llegar a los 40 minutitos de trote. Espero conseguirlo. Ahora, a descansar, que unas horitas estamos otra vez en el tajo.
P.D. Para una vez que me iban a dar una buena propinilla por un tratamiento facial, va y tenemos la caja cerrada, no lo podemos dar cambio y ... buaaffff, que quedo sin mis diez euracos. Otra vez será.
P.D. 2. Aviso para navegantes: cuando vayas a que te hagan un masaje integral, por favor, un lavaíllo de gato por lo menos.

PAZ Y AMOR

lunes, 18 de octubre de 2010

Receta tarta de queso con mermelada de moras silvestres

Ingredientes de la tarta de queso 

 1 litro de leche; 400 ml. de nata líquida; 9 cucharadas soperas de azúcar; 3 sobres de cuajada royal; 9 quesitos en porciones; 3 huevos.
 
Ingredientes de la mermelada de moras

½ kilo de moras frescas (en este caso, son silvestres, recolectadas cerca de casa).
½ kilo de azúcar
Jugo de limón.

Preparación de la mermelada de moras:

Limpiar las moras, retirándole todas las impurezas, luego lavarlas muy bien y escurrirlas. Colocarlas en una cacerola, agregarle el azúcar y dejarlas en reposo (preferentemente toda la noche). Luego llevar a fuego medio hasta que rompa el hervor, no dejar de mover con cuchara o espátula de madera, bajar el fuego, agregarle el jugo de ½ limón y dejar que siga hirviendo más o menos 1/2 de hora. Si deseas eliminar las pepitas, antes de que tome punto la mermelada, las procesas o tamizas. Nuevamente la llevas a fuego bajo hasta que tome punto, moviendo constantemente para que no se queme. Retirar del fuego y proceder a envasarla.
 

Preparación de la tarta de queso

Se vierten la leche y la nata en una olla a fuego bajo hasta la ebullición. El resto de ingredientes los introcimos en el vaso de la batidora en el mismo orden relacionados anteriormente. Se mezclan con la batidora y, cuando la leche y la nata hiervan, se le añade lo del vaso hasta que hierva nuevamente, batiéndolo hasta que no queden grumos.
 
Una vez llevado a ebullición, se vierte sobre el molde elegido, se deja enfriar, se le añade por encima la mermelada de moras y se guarda en el frigorífico durante una noche. 




Disfrutando de la magia de Alicia Keys

domingo, 17 de octubre de 2010

Resumen

Llegó el final de la semana. Hago resumen y me doy cuenta de que, además de los veinte minutitos que corrí la semana pasada con mi hijo Christian, esta semana he salido a correr 4 días. Para mí está genial. Unos días ha sido más duro que otros, sobre todo por el madrugón, pero va valiendo la pena. Eso es lo que necesitaba, dar esos pasitos, animarme, motivarme, darme cuenta de que tengo fuerza de voluntad. Han sido una sesión de 17 minutos, otra de 24, una de 27 y una última de 30 minutos. Lo doy por bueno. Ahora hace falta seguir al pie del cañón, sin caer en el desánimo, aumentando un poco el volumen (la cantidad de minutos o kilómetros), que más adelante vendrá el aumento de intensidad o velocidad de carrera (en forma de fartlek, intervals, ¿series?). Bueno, ya se andará. Seguiré informando.

Antes de nada, gracias a todos por vuestro apoyo, por vuestros comentarios, por estar ahí.

sábado, 16 de octubre de 2010

Reflexión

La verdad es que el deporte del correr es ideal para que, durante su práctica, ir pensando en multitud de cosas, o para relajarte y evadirte, o para pensar en el futuro. Viendo lo que he venido haciendo esta semana me doy cuenta de lo que es capaz de hacer el ser humano. No me refiero a que yo he sido capaz de nada especial por haber salido a correr durante 5 días en poco más de una semana, eso es algo que me ha costado, pero que no tiene nada de particular. Me refiero a que, con empeño, con determinación, con inteligencia, fuerza y muchas otras cualidades más, somos capaces de conseguir lo que queramos. En esta semana he corrido a una velocidad media, aproximadamente, de 10 kilómetros por hora, en algunos momentos más sofocados, en algunos otros más relajado y cómodo, pero no deja de ser correr a una velocidad de 6 minutos por kilómetro. Sin medir exactamente los kilómetros realizados, calculo que el día de mayor kilometraje habrá sido hoy: 5 kilómetros. Es poco, lo se, pero tiene que ser así, ahora se trata de sentar las bases de lo que está por venir. 

Hace 3 años y medio dejé de correr por un accidente, un parón del que he venido renqueando hasta ahora, saliendo a correr de forma muy irregular y nada constante. Sin embargo, hasta ese momento, hasta febrero de 2.007, había estado preparando pruebas de todo tipo, desde millas hasta 2 maratones. Lo que a mí me parece increíble es haber podido correr un maratón, casi dos, después de haber comenzado a correr de una forma similar a la de ahora. Un maratón, para quien no lo sepa, es una prueba que consiste en correr la distancia de 42kilómetros y 195 metros. Lo conseguí en 2.006, empujado por los ánimos de mis amigos Jaime (Hilario) y Javi (Saltatapias), que me convencieron durante un rodaje en diciembre de 2.005. La preparación del maratón fue dura, aún recuerdo un día en que troté durante 2h31 minutos en un circuito de 2 kilómetros de ida y otros 2 kilómetros de vuelta. La gente que me veía pasar una y otra vez se giraba y debía de pensar que estaba más zumbao que todas las cosas. O sea, de no ser capaz de correr 3 kilómetros seguidos mi cuerpo y mi mente fueron capaces de correr algo más de 42 sin parar, a una velocidad de 4´30´´ aproximadamente cada kilómetro. Ahora me cuesta trabajo creérmelo, pero lo hice, ¿podré volver a hacerlo? Imagino que con constancia y con salud se podría conseguir, pero ¿qué quiero hacer? Ya el otro día me preguntó un amigo si estaba preparando alguna prueba. No, ahora estoy preparando mi cuerpo, mi mento, luego ya veremos en qué berenjenales me meto, pero es muy duro, no se si demasiado, ponerse uno a preparar pruebas tan largas. Al tiempo. Ya veremos. Con los dos trabajos y los quehaceres de la casa será complicado, pero siempre me puedo quedar en pruebas más cortitas y asequibles. Ya os contaré.

viernes, 15 de octubre de 2010

El inicio

Como ya amenacé esta mañana en mi facebook, me he creado un blog. No es el primero, tampoco será el último. En este rincón me gustaría plasmar mis inquietudes, mi día a día, mis entrenamientos, alguna que otra chorradilla, comentarios, sugerencias, fotos. En fin, cualquier cosa que se me ocurra. Me gusta escribir. Me paso todo el día escribiendo en mi trabajo matutino, que no matutano. Sí, digo matutino porque también tengo trabajo vespertino, no tengo vespa, sino una escúter normalita, pero escacharrá. A veces me da cosa decir que soy pluriempleado, sobre todo teniendo en cuenta lo mal que está la cosa para conseguir un empleo, pero no me queda otra. Si quiero vivir, o sobrevivir, si quiero que mi familia coma y salga adelante, tengo que seguir al pie del cañón, con mis dos curros. En el matutino soy funcionario, administrativo para más señas, y en el vespertino soy masajista-terapeuta en un spa de un complejo de golf de esta nuestra Costa del Sol. 

Imaginándome como me imagino que más de uno se preguntará a qué viene eso de sereno, sobre todo para la gente heredera de la LOGSE, les comento:  el sereno es un personaje habitual años ha en varios países cuya función, por ejemplo en España, consistía en encender las farolas y vigilar las calles de noche, pero también era el encargado de abrir los portales de las viviendas durante las horas nocturnas. La figura despareció con la llegada de los porteros automáticos, aunque actualmente se han vuelto a implantar en ciudades como Gijón y Murcia. Ya que por motivos laborales y familiares tengo que salir a correr antes de que el sereno cumpla con sus deberes, he ahí que he elegido a este personaje para titular este pequeño diario, que será también vuestro en cuanto queráis acogerlo con cariño, darle calor con vuestros comentarios, sugerencias, ocurrencias ...